sábado, 6 de marzo de 2010

km 1207


Hay pequeñas cosas que no tienen a donde esconderse, hay cambios tan grandes que nadie se da cuenta, hay cosas que se creen tan eternas que duran poco para siempre.

La belleza no se mide en tiempo, pero no importa, eso jamás se enseña, al tiempo en cambio lo aprendimos a medir, pero eso tampoco importa porque jamás aprendemos de lo estrictamente preciso. La nada esta en lo absoluto y el amor en la imprudencia de las cosas que no tienen orden, en lo impreciso de querer y comprender, en lo estricto de saber quien soy siendo con vos, con todos. Hay que aprender a abandonar negligencias porque hay cosas inteligibles que no nos comprenden. En la meseta del calendario no encontramos la belleza de nada y estamos tan acostumbrados al orden de las cosas que el lunes siempre será el primer día.
El engaño del olvido es promovido por la misma distorsión del tiempo que habita junto a las pelusas grises de un bolsillo viejo.
Ignorar lo que uno fue siendo mientras era, hoy es un delirio bañado en cobardía.
La poesía de vivir viaja en auto devorando kilómetros con cuatro bocas que muerden la nostalgia de lo que había sido pero que también saborean el metálico gusto de lo que no ha podido ser. Viaja entre querer dejar de ser mientras las horas del calendario anuncian el calentamiento global de las ideas que no mueren y cierto mundo te invita a visitar sus lapidas, viaja y no sabe estacionar su duda entre lo colectivo y personal. La poesía que muere no se destruye pero si se detiene; el tiempo que el hombre no comprende sabe conjugar el renacimiento de ciertas cosas que envejecen.

Hay un mundo inesperado que esta esperando, hay de que llenarse no solo la boca.
Saberme incompleto y no insatisfecho, es de las cosas más hermosas que me apropie en la vida.

Bitacora de Caminos Singulares

2 comentarios:

Poetas Intenteros dijo...

compañero, amigo, con la foto ya me emocionaste, vos ve si el puema no! Que mejor ejemplo de la imprudencia y del desorden (sobretodo mental) de esos tres, no? Excelente man!

Un abrazo peronista

Alvaro.

Anónimo dijo...

El tres, como dijo tu profe en una clase... que mas quieres que salga de ahi..
Gracias por pasar